Las mañanas de colegio son un estrés: hábitos sencillos para acabar con este infierno

No hay sonido más temido entre semana que el del despertador. Ya es duro cuando suena y toca ponerse en marcha para ir a trabajar, pero todavía lo es más cuando lo que toca es poner en marcha a los hijos e hijas que tienen que prepararse para ir al colegio: equivale a un día extra de trabajo. A este momento le suele seguir una secuencia de escenas dignas de cualquier comedia familiar: niños que no quieren levantarse, desayunos a medio terminar, mochilas sin preparar, discusiones por una camiseta que “pica” o unos calcetines que “me molestan por las costuras”. Y todo esto con el reloj como juez implacable, marcando la cuenta atrás hacia la hora de salida. Las mañanas escolares se convierten, en demasiadas casas, en una especie de yincana emocional que deja a todos agotados antes de que siquiera empiece el día. Dicho de otro modo, y no pasa nada por decirlo aquí en alto, que los peques no nos oyen: las mañanas de colegio pueden ser un infierno.

Existen herramientas

Pero… ¿y si no tuviera por qué ser así? ¿Y si existieran herramientas sencillas que nos ayudaran a transformar esas primeras horas del día en algo más llevadero, incluso (sí, incluso) en una rutina amable? Puede que no siempre funcionen, pero el neuropsicólogo Álvaro Bilbao, una de las voces más influyentes en crianza, ha compartido en su perfil de Instagram una propuesta sencilla de poner en práctica: un puñado de hábitos que pueden marcar un antes y un después en el caos matinal.

El experto en neuropsicología y autor de El cerebro del niño explicado a los padres, sugiere que establecer rutinas claras y consistentes puede reducir significativamente el estrés matutino. Y, del mismo modo, también considera esencial reducir el estrés no solo desde el momento en el que despertamos a los peques, sino desde el minuto 1 en el que los adultos ponemos los pies fuera de la cama.

Lo que plantea Bilbao no tiene nada de milagroso ni requiere cambiar radicalmente nuestra forma de afrontar las mañanas de colegio. Son varios gestos al alcance de cualquier familia, centrados en tres pilares: la preparación anticipada, la consistencia de rutinas y la conexión emocional. “Tus hijos están más sensibles, irritables y se mostrarán mucho más susceptibles cuando les metes prisa”, advierte Álvaro Bilbao.

Los concejos de Álvaro Bilbao para las mañanas de colegio

Dividimos los consejos de Álvaro Bilbao para las mañanas de colegio en dos bloques: antes de que se despierten los niños y a la hora de despertarlos. Son consejos para padres que tienen que responsabilizarse del despertar de sus hijos e hijas y de la rutina en las mañanas de colegio.

Preparar la ropa y la mochila la noche anterior

El primer consejo de Álvaro Bilbao es que dejemos todo listo la noche anterior porque esto evita prisas y olvidos por la mañana. Deja el desayuno, la ropa y las mochilas preparadas con ayuda de tus peques porque es importante fomentar su independencia y cultivar en ellos la responsabilidad individual.

“Eso ayudará a tu cerebro a tener menos tareas en las que pensar y centrarse en ayudar a los niños con más calma”, explica.

Despiértate 20 minutos antes que ellos

Mantener una actitud positiva y calmada en las mañanas de colegio es más sencillo si te despiertas antes que tus hijos. Esto es importante, según Álvaro Bilbao, porque “durante los 30 minutos después de despertarte tus niveles de cortisol se disparan”. “Por eso —añade Bilbao–, muchas personas no quieren que les hablen o estimulen durante los primeros minutos de la mañana”.

En base a esta evidencia científica, el neuropsicólogo aconseja a los padres despertarse 20 minutos antes que sus hijos cada mañana de colegio. “Date un poco de tiempo para adaptarte a la luz solar y tus niveles de cortisol. Esto te permitirá tener una mayor sensación de control y que comiences la mañana de una forma más calmada”, dice Bilbao.

Ducha y ejercicios de respiración

En esos 20 minutos sin peques de las mañanas de colegio, Álvaro Bilbao recomienda dos acciones a los padres: una ducha, y/o ejercicios de respiración. En la ducha, aconseja el experto, “masajea la zona del cuello, alterna agua caliente y fría o tararea una canción”, apunta. “Así activarás el nervio vago, que es un poderoso aliado para regular los niveles de estrés”, añade.

Seguir un hábito como este, comenta Álvaro Bilbao, “te permitirá despertar a tus hijos con una energía más equilibrada que ellos notarán”.

Las tres reglas PARA DESPERTAR a los niños

Los niños y niñas suelen reflejar el estado emocional de sus padres. Mantener la calma y una actitud positiva, incluso cuando surgen contratiempos, puede ayudarles a manejar mejor el estrés matutino.

Álvaro Bilbao sugiere los siguientes hábitos para despertar a los niños en las mañanas de colegio. Son tres reglas muy sencillas:

Despertarles con tiempo

“Les ayudará a ellos también a adaptarse progresivamente a la luz y sus propios niveles de cortisol”, apunta el experto en el cerebro de los niños.

Despertarles con calma

Evitar las prisas o el exceso de energía les ayudará “a evitar una subida brusca de cortisol y les ayudará a estar más calmados”, explica Álvaro Bilbao.

Darles afecto

Tumbarte a su lado, darles caricias, tocarles el pecho… Cualquier gesto ayuda si es para despertarles con mimos y afecto. “El contacto emocional te ayudará a ti y a ellos a activar el sistema parasimpático y a contrarrestar los niveles de estrés”, concluye Álvaro Bilbao.